Se puede definir el trabajo forzoso como todo trabajo o servicio realizado bajo amenazas de castigo (incluido el no pago del salario, el despido y la violencia declarada o la amenaza de violencia) y que se realiza contra la propia voluntad. Constituye una grave violación de los derechos humanos y una restricción de la libertad de la persona.
Posibles situaciones de vulneración de derechos más comunes:
- Limitar la movilidad de las personas de su zona de empleo, por ejemplo, sólo a sus dormitorios, en caso de que la empresa los provea.
- Amenazar con violencia física o sexual contra el trabajador, contra su familia o contra personas cercanas a él para hacerles trabajar.
- Amenazar con deportar a las personas trabajadoras o denunciarlos ante las autoridades para que estos continúen trabajando después de que se haya acabado su contrato, particularmente relevante en el caso de trabajadores migrantes.
- Amenazar con encarcelación u otro confinamiento físico o con represalias sobrenaturales
Retención de salarios o retención de documentos de identificación para que los trabajadores no puedan irse de un trabajo.
- Agencia de contratación retiene pagos.
- Pagar demasiados salarios por anticipado y/o salarios en especie al punto que la persona trabajadora está tan endeudado que no puede dejar el trabajo.
- Amenaza con exclusión de la comunidad y de la vida social, con la pérdida de condición social.
- Amenaza de privación de alimento, cobijo u otras necesidades.
Importante, considerar que la amenaza como medios para mantener a alguien en una situación de trabajo forzoso, puede configurarse ante la presencia real o amenaza creíble de que el hecho suceda.
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